miércoles, 3 de agosto de 2011

Los Frutos del Espíritu Santo: El Amor

Cuan grande es el amor que Dios dio por la humanidad que nunca pensé que haría por mi y por todos, nuestro señor Jesucristo dio por amor a la humanidad y eso no lo podemos negar porque mayor es que todo este mundo. El amor es uno dar por completo de su vida hacia algo, amar es la palabra que este mundo no escucha porque piensan que si aman serian tontos, que no tienen conciencia de lo que dice, piensan que la pasión es amar pero se equivocan, y hay pocas personas que verdaderamente saben amar. El amor es algo que viene de Dios, es algo divino, mas que esto no existe. Juan 3:16-17  Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en El, no se pierda, mas tenga vida eterna. 17  Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por El.. 8:1 ¡Oh, si tú fueras como un hermano mío 
Que mamó los pechos de mi madre! 
Entonces, hallándote fuera, te besaría, 
Y no me menospreciarían. 
8:2 Yo te llevaría, te metería en casa de mi madre; 
Tú me enseñarías, 
Y yo te haría beber vino 
Adobado del mosto de mis granadas. 
8:3 Su izquierda esté debajo de mi cabeza, 
Y su derecha me abrace. 
8:4 Os conjuro, oh doncellas de Jerusalén, 
Que no despertéis ni hagáis velar al amor, 
Hasta que quiera.
8:5 ¿Quién es ésta que sube del desierto, 

Recostada sobre su amado? 
Debajo de un manzano te desperté; 
Allí tuvo tu madre dolores, 
Allí tuvo dolores la que te dio a luz. 
8:6 Ponme como un sello sobre tu corazón, como una marca sobre tu brazo; 
Porque fuerte es como la muerte el amor; 
Duros como el Seol los celos; 
Sus brasas, brasas de fuego, fuerte llama. 
8:7 Las muchas aguas no podrán apagar el amor, 
Ni lo ahogarán los ríos. 
Si diese el hombre todos los bienes de su casa por este amor, 
De cierto lo menospreciarían. 
8:8 Tenemos una pequeña hermana, 
Que no tiene pechos; 
¿Qué haremos a nuestra hermana 
Cuando de ella se hablare? 
8:9 Si ella es muro, 
Edificaremos sobre él un palacio de plata; 
Si fuere puerta, 
La guarneceremos con tablas de cedro. 
8:10 Yo soy muro, y mis pechos como torres, 
Desde que fui en sus ojos como la que halla paz. 
8:11 Salomón tuvo una viña en Baal-hamón, 
La cual entregó a guardas, 
Cada uno de los cuales debía traer mil monedas de plata por su fruto. 
8:12 Mi viña, que es mía, está delante de mí; 
Las mil serán tuyas, oh Salomón, 
Y doscientas para los que guardan su fruto. 
8:13 Oh, tú que habitas en los huertos, 
Los compañeros escuchan tu voz; 
Házmela oír. 
8:14 Apresúrate, amado mío, 
Y sé semejante al corzo, o al cervatillo, 
Sobre las montañas de los aromas. Cantar de los Cantares 8
espero les gusten, que el Espíritu del Amor sea con ustedes.
saludos.


El Espíritu Santo su historia.

Siempre pensaba que el Espíritu Santo era alguna cosa para gente grande, pero es mentira porque en verdad existe y quiere llegar a la vida de todos los seres humanos que con un corazón sincero, quiero contarle la verdadera historia del Espíritu Santo:
El Espíritu del Señor estaba en la tierra, creando toda su perfección, mas cuando el hombre desobedeció al Creador, Dios empezó a haber problemas tanto en la tierra como en el cielo. Mas cuando Dios mostró a  sus profetas, sus siervos que iba nacer su hijo, el que nos redimiría de todo lo que causamos al inicio, nuestro señor Jesucristo que llevando todo Él prometió que mandaria sobre nosotros otro Consolador, el Espiritu Santo.14:6 Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. 
14:7 Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto.
14:8 Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta.
14:9 Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre?
14:10 ¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras.
14:11 Creedme que yo soy en el Padre, y el Padre en mí; de otra manera, creedme por las mismas obras.
14:12 De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre.
14:13 Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.
14:14 Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré.
14:15 Si me amáis, guardad mis mandamientos.
14:16 Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:
14:17 el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.
14:18 No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.
14:19 Todavía un poco, y el mundo no me verá más; pero vosotros me veréis; porque yo vivo, vosotros también viviréis.
14:20 En aquel día vosotros conoceréis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros.
14:21 El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él.
14:22 Le dijo Judas (no el Iscariote): Señor, ¿cómo es que te manifestarás a nosotros, y no al mundo?
14:23 Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él.
14:24 El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió.
14:25 Os he dicho estas cosas estando con vosotros.
14:26 Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.
14:27 La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.
14:28 Habéis oído que yo os he dicho: Voy, y vengo a vosotros. Si me amarais, os habríais regocijado, porque he dicho que voy al Padre; porque el Padre mayor es que yo.
14:29 Y ahora os lo he dicho antes que suceda, para que cuando suceda, creáis.
14:30 No hablaré ya mucho con vosotros; porque viene el príncipe de este mundo, y él nada tiene en mí.
14:31 Mas para que el mundo conozca que amo al Padre, y como el Padre me mandó, así hago. Levantaos, vamos de aquí. Juan 14, 6-31.
Sepa que Él quiere inundar tu corazón. Aceptelo y cambiara tu vida.
un saludo y Dios los bendiga mucho.